La playa de Bucca ‘e strumpu termina con el inicio de la Torre, la que se puede definir como la “reina” de las playas de Bari. La playa se divide en “Sa spiaggia de is feminas”, a la derecha de la torre, y “Sa spiaggia de is mascus” a su izquierda, período en el cual las dos playas eran visitadas por hombres y mujeres por separado. La parte norte de la torre se caracteriza por el fondo de arena de grano grueso y de un color ligeramente ocre, con un bosque de pinos a sus espaldas. Al sur de la torre, por el contrario, la playa alcanza características muy diferentes: el arenal está formado por piedras de color gris y arena fina y se extiende hasta un pequeño promontorio de granito que la separa de la playa de Sa Marina. Las aguas cristalinas de esta playa se caracterizan por su fondo bajo que se degrada rápidamente.

No hay que decir que lo que caracteriza y domina el paisaje de esta maravillosa playa es la torre española. Construida en una fecha imprecisa tras el mandato de Felipe II de España de 1580, sin duda debería haber sido construida y estar funcionando en 1597, ya que en los registros parroquiales consta que el alcalde de la torre fue testigo de una boda con fecha 20 de febrero.

Para la construcción de la torre se utilizaron rocas de granito y basálticas, usando el material de construcción disponible en el lugar. Según la hipótesis de algunos eruditos, esta torre no debería haber sido edificada sobre el lecho de rocas sobre el que se encuentra ahora, sino más al norte, en Punta Niedda. Por una vez estamos agradecidos a los acontecimientos históricos de que las cosas no hayan sido diferentes: raramente la presencia del hombre en la naturaleza ha logrado infundir encanto y atractivo a un lugar que, de otro modo, habría sido sencillamente hermoso.

La torre, además es también un lugar que para los habitantes del lugar posee significados religiosos especiales. Durante la fiesta de San Giovanni Battista (San Juan Bautista) que se celebra en julio de cada año, se celebra también la fiesta de “Su Nenniri”, que son los brotes de trigo que se encuentran en una olla de barro, decorado con cintas, flores y una cruz de caña. En el ritual de la fiesta el germen de trigo, una vez celebrada la procesión, se tira al mar en las aguas que se encuentran al pie de la torre.